Tertulia Literaria La Metamorfosis

Tertulia Literaria La Metamorfosis

miércoles, 31 de diciembre de 2014

A MI TIO EL QUE AMA LA LITERATURA



A MI TIO EL QUE AMA  LA LITERATURA

Por mi tío aprendí a amar la literatura. Un héroe que me dejó cientos de historias y enseñanzas. Hoy lo menos que puedo hacer es honrarlo, reviviendo la emoción  que  me dejó la vez que me contó que iba a escribir un libro, sentado frente a un computador obsoleto pero eficiente. Mi tío es tal vez la persona que más rápido  he visto tecleando.
Se fue y no hice nada para impedirlo, empacó maletas en un solo día, guardó la cafetera y la colección de libros de José Saramago e  Isabel allende. El apartamento estaba vacío y el tiquete del avión ya estaba comprado.
Canceló la suscripción del cable de televisión, se despidió de sus plantas, asistió a varias despedidas que le organizaron. 
¡Y me dio rabia!
Me dio rabia porque se fue a ser feliz con él. Se fue a su ciudad a la que conoce de norte a sur,  a descansar como el solo sabe hacerlo,  a caminar por calles coloniales, a visitar museos, a tomar café negro como la noche, caliente como el infierno y suave como abrazo de mujer y sobretodo inmortalizó el momento en que se fue.
Hoy ya hace varios años, y puedo decir que a eso si le puede llamar una despedida y me pregunto si seré parte de su pasado como una mancha distante sin cabida en su nueva vida feliz.
Por eso es que siempre dejo ir a la gente porque se va a ser feliz y feliz con lo mínimo

…con lo mínimo necesario sobrino
JORGE BOTERO CAMPUZANO
Magangué, 2.014

miércoles, 10 de diciembre de 2014

Cuento



Quiero contarte que tuve un buen día

 Desperté. Me senté en el borde de la cama con los codos sobre las piernas y las manos en la cara, tratando de recordar quien soy. Varios segundos después me puse de pie, hice ejercicios y me alisté para ir a trabajar.
 Revisé negocios, mandé informes y contesté llamadas. Estuve en reuniones, presenté ideas y aguanté regaños. Tome mucha agua. No deje de pensar en ti.
No pude llamarte ni escribirte. No encontré manera humana de hacerte saber que estaba pensando en ti. Quise  escribirte.
 Nos conocimos un día como hoy ¿Te acuerdas?
¡¡Yo sí!! Todos los días.
Los detalles de cómo sucedieron las cosas no son imprescindibles, nunca quiero pensar. Me fastidia.  Lo único que rescato, es que ninguno de los dos quería estar en ese lugar dónde nos vimos por primera vez.
Empezamos a hablar y supe más de ti en diez minutos, que lo que se de gente que conozco de toda la vida. Fuiste genial, auténtica, frentera, y segura. Sonriente pero franca. Transparente pero impredecible.
Todo tu cuerpo concordaba con todo lo tuyo, hasta tus gestos protagonizaban y tu sonrisa... Me hacía temblar, ¿me daría fiebre?
La mañana siguiente te llamé. Hablamos dos horas. Una semana después te besé, reuní valor ocho días. A los quince días discutíamos de religión, política, y géneros. Compartimos música y nada nos molestaba.
 Desde ese día hasta hoy he querido decirte, que siento como si siempre te hubiese estado esperando.
Jorge F. Botero
Magangué, diciembre de 2.014

viernes, 5 de diciembre de 2014

Naufragios
Me leí un libro de un japonés, que se llama Naufragios, Una novela corta que no tiene grandes sobresaltos, es la histoira de un pueblo japonés a la orilla del mar del Japón,  Es la histoira del hambre y de la lucha por la sobreviviencia, donde todo o casi todo viene del mar, lo bueno en un comienzo hasta que llegó lo malo y rompió con el euilibrio de la sobreviviencia y trajo definitivamente la peste y la muerte,  es un libro tan simple, con una narrativa básica pero un tema finalmente desgarrador.  Definitivamente los japoneses son descarnados y se leen con una gran crueldad.

Rana
El premio nobel japonés autor de Rana, no pudo salir de su país a recibir este importnte galardón porque si salía no le era permitido regresar.  En esta historia que toma el nombre del  símbolo chino de la maternidad, materniadad que fue vulnerada, atropellada y atacada ferozmente durante la revolución cultural y que en la era moderna terminó siendo moneda de cambio y privilegio de los más pudientes, en un país disfrazado de comunista, porque el capitalismo es tan avasallador y feroz como en Estados Unidos símbolo mundial del capitalismo.  La denuncia parece inocente y hasta ingenua, pero no deja de ser denuncia.
En otro libro de Isabela Allende, en Retrato en Sepia hace denuncias terribles cobre la situación de la mujer en China a finales del siglo XIX y comienzos del XX donde eran ahogadas, vendidas desde pequeñitas para dedicarlas a la prostitución en Estados Unidos y tomads como seres insignificantes y merecedores d ela pero de las suertes.  Que abominación, al menos en Colombia tenemos derecho a decidir y las mujeres tenemos una condición humana razonable.

jueves, 17 de julio de 2014

¡Mujer!

Todas las noches en afán de venganza cuando lo veía llegar borracho le gritaba ¡Cachón, Cachón!.  Nunca se dió cuenta si al ebrio al que le dirigía esas palabras le entendía.  Sólo pudo medir las consecuencias de sus palabras cuando un día en la mañana él  le dijo: "Me voy, quédese con su nuevo marido" y salió.  Desde
 ese día la mujer se duele de haberse quedado sin un marido y sin un amante para acompañarse.
María Botero

Paranoica

Acabo de leer un pequeño libro PARANOICA, un pequeño texto que a primera vista parece un libro infantil ilustrado.  Pero cuando uno pasa sus páginas encuentra  una mezcla de arte Manga japonés con una ilustraciones de una musulmana típica.  Su autora la coreana JUNG YUMI, profesional en artes plásticas logra desentrañar en trazos mínimos  la dureza de esta cultura sobre el g´nero femenino.  Logra arrancar del fondo del corazón de esta mujer el dolor de la sumisión y el desencanto de la impotencia.
" Sólo yo no puedo ver la manera en que luzco para las otras personas"

viernes, 4 de julio de 2014

https://storybird.com/books/la-mujer-que-comia-palabras-segunda-parte/edit-info/
https://storybird.com/books/la-mujer-que-comia-palabras/?token=mmqxqg3xfx

Lygia Bojunga, Clase de Inglés

En este libro breve de ciento cincuenta páginas, la autora brasileña, Lygia Bojunga hace una reflexión sobre el amor, como lo reseña en la contraportada. Pero me llamó más la atención un juego o una propuesta que explotó de manera extensa nuestro nobel Gabriel García Márquez y es el uso de una misma palabra, en este caso es Penélope. Un nombre con una carga histórica grande desde la Odisea de Homero en la antigua Grecia, pero en este caso camina desde Inglaterra hasta Brasil con la misma carga emocional y generando las mismas sensaciones y recuerdos. Viene como Penny del pasado del profesor de inglés y vuelve como Penélope en la jóven alumna que desea convertirse en ella para salvar a un escritor del que se ha enamorado por su obra. En esta novela corta se disfruta de la una herencia de realismo mágico de manera actual y ágil.

martes, 24 de junio de 2014

domingo, 22 de junio de 2014

viernes, 20 de junio de 2014

Sentido del Blog
A mi blog he añadido dos blog que ayudan a comprender el sentido de este espacio, para los lectores y escritores aficionados, que desafortunadamente no contamos con la industria editorial de nuestra mano, debemos valernos de estas posibilidades para difundir nuestras inquietudes y nuestras creaciones.  Por eso estos dos blog Que voy a inventar y ¡Nah! nos ofrece una gama de microcuentos ágiles y muy agradables, por eso quiero compartirlos y espero sean de mucha utilidad.

Microcuento ¿El Paseo Millonario?

Quiero compartir un microcuento.

¿El Paseo Millonario?

Seguía parada en la esquina del banco, urgando  mi bolso con apremio y un tanto de nerviosismo.  Mis manos salían y entraban en la búsqueda incesante y con la esperanza de que algún billete que en el pasado se hubiera podido refundir encontrara el camino de regreso a la luz y a la vez el camino de regreso a mis dedos angustiados.  no tenía ni para un pasaje y mi casa definitivamente estaba muy lejos para llegar caminando y con el traje que llevaba puesto, "el mejorcito", el de ocasión.  Ese día había venido a presentarme a una entrevista de trabajo en la que tenía puestas todas mis esperanzas, pero hasta el dinero de venida al centro lo había prestado, pero el de regreso definitivamente no aparecía por ningún lado.  Finalmente se me ocurrió una idea salvadora, usar una de mis tarjetas de crédito a sabiendas de que no tenían ni  un  centavo , pero de pronto la tecnología sufría un desperfecto y me entregaba cualquier billete despistado que me permitiera conseguir mi cometido.
Tan entretenida me encontraba que no noté el automovil de cuatro puertas que se plantó frente a mi en la misma y fatídica esquina del banco.  Al parecer dos hombres presurosos descendieron  y me tomaron por los antebrazos hasta casi levantarme del piso para hacerme ingresar violentamente al vehículo.  No alcanzaba a entender que pasaba, hasta que los sujetos, tres en total con el conductor arrancaron a gran velocidad.
Después de múltiples amenazas y exhibiciones de armas, me aclararon que ese era un paseo millonario, que iban a desocupar mis cuentas y que me iban a tirar  a la orilla del río.  No se sí fue por el temor o simplemente por lo absurda que me sonó esa parte donde decían que iban a desocupar mis cuentas... mis cuentas, esas que yo misma soñaba con defraudar, con estafar, con atracar para al menos conseguir !el infeliz monto de un pasaje¡, pero me desaté en una carcajada.  En una contagiosa y envolvente carcajada, que desde el colegio me había costado sanciones y reprimendas por su capacidad de arrastrar y adherir a su ejército montones de carcajadas a su alrededor, esa carcajada pegajosa.  Los violentos sujetos no se lo creían.  Mis ojos soltaban lágrimas y mi boca no lograba articular una frase con sentido, la carcajada me ahogaba la voz.  Los sujetos empezaron a reirse sin saber ni porque lo hacían.  Pero el conductor que no compartía mi asiento consiguió mantener la cabeza fría y recordó el objetivo del secuestro.  Entre risas ahogadas uno de los de atrás, el más gordo hiló una dirección que el otro copió con dificultad y haciendo numerosas preguntas que el otro contestaba de manera fraccionada..  Cuando llegamos al primer banco de donde iban a sustraer gran cantidad de mi dinero, los músculos de los atracadores estaban completamente relajados y no conseguían ponerse en pie.  El conductor trató de llamarles la atención, pero la escena de los tres revolcándonos de la   risa en el asiento trasero fue la imágen que consiguió romper su determinación y aunque insistía bájense y traigan el dinero del cajero; su voz  no sonaba como una orden sino como una sugerencia.
Cuando los agentes de la policía y los vigilantes del banco se percataron de  nuestra presencia y de nuestro estacionamiento prohibido se acercaron a llamarnos la atención y a hacer una requisa.  Mis amigos ladrones no salieron muy bien librados, en cambio yo, si logré resolver mi problema, porque la patrulla decidió acompañarme hasta mi residencia para evitar ser víctima nuevamente de atracadores de tan terrible condición.  Yo apenas conseguía secarme las lágrimas y contener mi vejiga que se había llenado por el ejercicio continúo de la risa.
Magangué, 2.014

Invitación

Tutora: La invito a compartir mi grupo en facebook Humanidades cecar 2,es un grupo en facebook para compartir  temas de educación que he creado para interactuar con mis compañeros de universidad, es muy útil porque por este medio nos comunicamos y lanzamos preguntas abiertas sobre cualquier tema de los que estamos tratando en nuestros contenidos y cualquier aporte de un  compañero o no de la universidad nos nutre y nos mejora como estudiantes y futuros profesores.  La invito a usted y a todas las personas que les apasione la educación para que nos acompañes.

martes, 17 de junio de 2014

Actividad 1

Comparto mi presentación de prezy sobre la célula animal, el objetivo de esta actividad era probar la  herramienta, espero que les guste.

Y comparto un video que hice con la herramienta movies maker que nya he compartido por facebook, espero que les guste.

domingo, 15 de junio de 2014

Los Viajes de Gulliver
El libro de Jonathan Swift reducido al cine por los norteamericanos. cuenta muchas historias curiosas, no solo aquellas donde todos son pequeños con respecto a él, sino también donde todos son grandes y él un pequeño bicho en exhibición.  Pero hacía el final de libro me ha llamado la atención la invención de unos personajes por lo demás americanos, cercanos a México que era el destino final del barco Aventura que el protagonista capitaneaba, y que fue objeto de un motín y el dichoso personaje fue dejado en una isla con unos seres primitivos de apariencia feroz y con capacidad de convertirse en hermosos caballos, estos seres eran llamados Yahoo, como el conocido  buscador.  Si alguien tiene más información me gustaría que la compartiéramos.
Memoria Por Correspondencia de Emma Reyes

Llegué a este libro completamente ignorante de que era el libro del año 2.012.  Llegué a él porque el Ministerio de la Cultura mandó una remesa a la Biblioteca del Centro de Convivencia de Magangué (Bolívar ) y el estilo epistolar me llama mucho la atención, entonces me incliné sobre él.  Este libro además de contar una historia muy dura, es una radiografía de una época, en Colombia tenemos la idea de que los males de este país vienen desde la violencia, pero que se menguaron con el Frente Nacional y que se volvieron a despertar con una furia mayor con el narcotráfico.  Esta autora es la prueba de que en nuestro país los problemas son tan viejos como sus habitantes.  Ahora al menos tenemos a Bienestar Familiar, me decía un amigo con quien compartía el contenido del libro.  Pero también en esta vida contada, en esta confesión hay algo muy aleccionador, Emma no se dejó contaminar por su infancia, se nutrió y aprovechó de ella  para convertirla en pintura con un estilo propio, único.  Llegó muy lejos a pesar de su origen incierto, fue un vínculo indispensable para los artistas que consiguieron éxito en Paris, entre ellos el pintor y escultor Botero.  Emma que con ingenuidad cuenta que al niño Jesús le hicieron muchos regalos unos señores Reyes como ella y su hermana Helena, dedicó su vida adulta a hacer muchos regalos, de amistad, buen humor y ejemplo de vida entre quienes tuvieron el gusto de compartir con ella.   
Maria Botero